¿Te acuerdas de Vidar Riseth?

- No es un caso extraño encontrar jugadores que sean capaces de jugar de defensas y como delanteros en alguna ocasión. Vidar Riseth podía hacerlo, aunque finalmente acabó siendo más zaguero que otra cosa. Con la selección noruega, por ejemplo, se le ha visto más bien en la zona de retaguardia, que es cuando más rendimiento sacó.
Tuvo un breve paso por el fútbol alemán y jugó en la liga escocesa, la austriaca y la inglesa, como componente del Luton Town. El resto lo hizo en la Eliteserien, defendiendo los colores de clubes como el Rosenborg o el Lillestrøm, entre otros.

Vidar nació en la ciudad noruega de Frosta, el 21 de de abril de 1972. Sus inicios fueron como jugador del modesto Neset, con el que jugaría desde finales de los ochenta para entrar en las filas inferiores del Rosenborg posteriormente.

En sus inicios jugaba como delantero, que es como se dio a conocer con el Neset. Sus 1´89 centímetros de estatura le servían para ser una amenaza constante en el juego aéreo. Además era un delantero de rápidos movimientos y con un chut potente que siempre procuraba orientar hacia ese punto donde nunca pueden llegar los porteros.
Como defensa incluso llegó a ser mejor, o eso dicen algunos expertos. Derecha o izquierda, da igual, pero siempre en el eje de la zaga, donde el jugador sabía moverse como pez en el agua sin descuidar la marca del contrario.

Defensa o delantero, la carrera de Riseth fue larga y exitosa. En 1991 llegaría al Rosenborg para jugar en el equipo filial. Sus progresos fueron fugaces y eso le serviría para llegar al primer equipo por la vía rápida, algo que conseguiría en cosa de un año para afrontar la campaña 1992\93 como profesional en la Eliteserien, también conocida como Tippeligaen.

Con el conjunto de Lerkendal tuvo pocas opciones, por lo que acabaría marchándose al Kongsvinger. Allí consiguió el protagonismo que buscaba, llegando a marcar veinte tantos que le llevarían a jugar prestado en Inglaterra en su último año de contrato.
Con el Luton Town seguiría cumpliendo con ese rol de atacanteque no podría defender a base de goles. Riseth no hizo goles, y tan solo participaría en once partidos de liga. Se marcharía de tierras británicas decepcionado con su primera experiencia en el extranjero.

Pero no sería el momento de volver al fútbol noruego y, el entonces delantero, se incorporaría al LASK Linz para pasar dos temporadas en la Bundesliga austriaca. De esa Bundesliga pasaría a la alemana, como miembro del 1860 München, tras un breve paso por las filas del Celtic de Glasgow, con el que solamente firmaría tres tantos en la liga escocesa.

En Alemania pasaría tres temporadas. Allí sufriría la conversión de delantero a defensa, y gracias a ello pudo participar en 43 encuentros de la liga alemana. En 2003 volvería al Rosenborg, ya con cartel internacional y varias lecciones aprendidas en diferentes ligas.
En cuatro temporadas con este histórico club, Riseth consiguió jugar más de cien partidos en los que convirtió doce goles. Pese a jugar como defensa, el de Frosta no había perdido la puntería, y por fin pudo quitarse la espina del pasado, cuando apenas tuvo apariciones con el Rosenborg.

En sus últimos años jugó para el Lillestrøm, de donde se iría cedido al Strømsgodset. Posteriormente ingresaría nuevamente en las filas del Kongsvinger, con el que concluiría su carrera en 2010 para convertirse en director de marketing del club.

Vemos a Riseth a la derecha de la imagen, durante un partido internacional frente a Suecia.

- Llegó a la selección principal de Noruega sin la necesidad de jugar anteriormente en las filas inferiores. Riseth fue llamado por el seleccionador Egil Olsen tras destacar en la liga austriaca con el LASK Linz.

Debutó con el equipo nacional de Noruega en un partido amistoso contra Colombia celebrado en el otoño de 1997. A partir de ahí se haría más popular su figura a nivel internacional. Pasaría por buenos clubes del extranjero y mantendría exitosamente su internacionalidad, llegando a completar unos registros de 54 partidos y 4 goles.