- Su nombre completo parece un juego de palabras, pero no. Gunnleifur Vignir Gunnleifsson tiene apellido patronímico, algo que suele ocurrir mucho por tradición en las familias nórdicas e incluso en las de Europa del Este.
Este hombre parece que ha bebido de las aguas de la fuente de la juventud eterna, puesto con casi 43 años aún seguía jugando al fútbol completando una amplísima carrera en la que ha defendido los intereses de diversos clubes islandeses. Hizo escala en Suiza para jugar en una corta etapa para el F.C. Vaduz.
También representó a la selección islandesa, aunque justó dejó de jugar cuando Islandia empezó a vivir su época dorada, por lo que no pudimos verle en la Eurocopa de Francia 2016. Su trayectoria internacional transcurre entre 2000 y 2014.
Este guardameta nació el 14 de julio de 1975 en la capital islandesa de Reykjavík. A comienzos de los noventa ingresó en las filas del HK Kópavogur, equipo en el que tendría dos años de formación antes de dar el salto profesional.
Con más de metro noventa de estatura, Gunnleifsson tenía grandes condiciones para actuar bajo palos. Es una pena que no pueda acudir al Mundial de Rusia, pues ya desde joven daba señales de ser un jugador experimentado. Buena colocación y seguridad combinado con fiel compromiso, así era este arquero que ejerció una carrera de más de veinte años.
Con el Kópavogur debutó en 1995 haciendo tres apariciones durante su primera temporada en la liga islandesa. Pero el equipo acabó bajando al segundo nivel y Gunnleifur acabaría desvinculándose de la entidad para fichar por el Knattspyrnufélag Fjarðabyggðar (KVA ).
Tras esa breve etapa en el KVA, el meta capitalino retornaría al Kópavogur para ganarse un papel protagonista en la categoría de plata. Participó en dieciocho partidos de liga cumpliendo con el rol de titular y estuvo a un nivel espectacular para ayudar al equipo en su regreso a la Úrvalsdeild Karla en 1997.
Habiendo cumplido su misión con el HK, Gunnleifsson sería contratado por el KR Reykjavík, con el que tuvo once apariciones durante el ejercicio 1998\99. Al no verse muy cómodo en el equipo de su ciudad, decidió fichar al año siguiente por el Keflavík.
Abandonó la capital después de haber figurado como una de las sorpresas de la liga islandesa para tener más protagonismo en Reykjanesbær. Se salió con la suya, pues tras otra sensacional campaña, el arquero acabaría entrando en sus primeras convocatorias con la selección islandesa.
Poco a poco fue labrándose una gran reputación en su país. Después de destacar en el Keflavík, volvería nuevamente al HK Kópavogur, aunque esta vez sería para pasar una larga temporada que le ocuparía siete años, posiblemente los mejores de su vida.
En todo ese tiempo participaría en 137 partidos, teniendo en cuenta que en su último año de contrato, desde Suiza llegaría una petición de cesión ante la falta de porteros en su plantilla. Fue así como Gunnleifur vivió su primera experiencia jugando en el Vaduz, con el que tuvo cinco apariciones en la Swiss Superleague.
Volvió a Islandia en 2010 para jugar dos años en el Fimleikafélag Hafnarfjarðar. Ya muy veterano, Gunnleifsson llegaría a jugar también para el Breiðablik, equipo en el que permaneció cuatro años, aguantando como un tigre hasta los 43 años de edad.
Gunnleifsson jugó 26 partidos para la selección de Islandia en sus catorce años como internacional. |
- Mientras jugaba para el Keflavík, Gunnleifsson tuvo la oportunidad de jugar sus tres primeros partidos para la selección islandesa. En julio de 2000 debutaría en la goleada frente a Malta por 5-0, ingresando en el campo cuando solamente quedaban siete minutos. Estreno con victoria.
Hasta 2014 tuvo apariciones esporádicas, llegando a intervenir en 26 partidos internacionales a lo largo de su carrera. Por desgracia, Gunnleifur no llegó a tiempo para acudir a la primera Eurocopa en la que ha competido su país, así como el primer Mundial, en el que Islandia debutará este verano.
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